El flyball es uno de los deportes para perros que ha cobrado fuerza en los últimos años volviéndose famoso a escalas internacionales.
El tercer deporte canino más importante del mundo es el Flyball. Año tras año nuevas personas se unen juntos a sus perros para practicarlo en diferentes puntos del planeta. Es un deporte que generalmente se practica en equipos, aunque también existen categorías para un perro sólo.
Este deporte se practica en varios países algunos de ellos son Estados Unidos (donde tuvo origen), Australia, Reino Unido, Bélgica y España.
Su origen data de los años 70, en California y fue presentado por primera vez el el programa televisivo de Johny Carson por el estadounidense Herbert Wagner. Tuvo tanto éxito que poco tiempo más tarde muchos entrenadores de perros estaban enseñandoles a sus canes el uso de las cajas flyball.
Es un juego de inteligencia en la que el perro, debe ubicarse dentro de un circuito donde hay cuatro barreras a una determinada distancia las unas de las otras. El perro debe ir hacia la caja ubicada al final del camino, allí encontrará un pedal que deberá accionar para que salga la pelota de tenis que se halla escondida; la cual deberá cogerla y corriendo en el sentido contrario al que vino, llevársela a su dueño. Esto debe hacerlo en un tiempo breve, lo más velozmente posible.
Generalmente los perros en acción simultánea son ocho, dos equipos de cuatro. Ambos equipos deben esforzarse por realizar la prueba e intentar superar al contrario. El ganador será aquel equipo que primero complete el ejercicio con sus cuatro perros.
Los obstáculos son diseñados de acuerdo al tamaño de los perros que compitan. La altura mínima de ellos es de 20 centímentros y la máxima de 40 centímetros.
El récord de flyball se localizó en Michigan, Estados Unidos,y fue un tiempo de 15, 43 segundos entre los cuatro perros que conformaban el equipo.
Este deporte fue ideado a fin de ofrecerles a los perros una manera de canalizar el instinto depredador innato que tienen y a gastar una gran cantidad de energía. Verlos corriendo por el podio es una imagen espectacular, ya que permite ver a través de la competición cómo los perros se comportarían en un estado natural, frente a sus presas. Además una de las mayores virtudes de este deporte es que ayuda a reforzar la confianza entre el perro y su dueño.
Es un deporte ideal para aquellos perrros hiperacticos y que necesitan un alto desgaste energético para estar saludables, sin embargo cualquier perro puede participar de estas competencias, aún si no se trata de un perro de raza. Además no exige de altos conocimientos de parte de los entrenadores, y al ser accesible para cualquier tamaño de perro, raza, etc, ha cobrado mucha popularidad sobre todo en Europa en los últimos años.