Si tu mascota te ensucia la casa y no sabes cómo corregirla lo mejor es ir lenta y pacientemente siguiendo una serie de pautas hasta lograr que ella se acostumbre a que su baño está fuera de casa.
Muchas personas cuando reciben un cachorrito en casa, al verlo tan pequeñito y tierno se comportan con él de manera errónea, enseñándole ciertas cosas que después, cuando se hacen grandes, no desean que hagan; por ejemplo que utilicen el piso del salón para hacer sus necesidades. De esta manera, ayudan a que el perro adquiera malas costumbres que más adelante tendrás que corregir. Si perteneces a este grupo aquí te presento algunos consejos prácticos para re-educar a tu perrito a hacer sus necesidades donde debe y no donde quiere o donde le permitiste primeramente.
Es importante que antes que nada quites el periódico del lugar donde solías ponérselo para que no crea que todavía puede hacer sus cosillas ahí.
Para enseñarle a ir al baño durante los paseos debes comenzar dándole paseos cortos (de 5 a 20 min) y en cuanto haga un pipí o lo que sea lo premias con una golosina o una buena caricia. Es bueno acostumbrarlo con alguna palabra mágica para que comience a relacionar ese momento con el de hacer sus necesidades.
Si durante la salida no hace nada, una vez vuelven a casa puedes estar atento y en cuanto veas que intenta hacer algo, lo sacas afuera, de este modo comenzará a discernir que eso no se hace en la casa.
A medida que vaya utilizando los paseos para hacer sus necesidades comenzarás a alargarlos, siempre premiándolo y reconociendo cuando hace lo que tu quieres, esto es muy importante pues los perros adoran los premios y las recompensas y también dejar contentos a sus amos.
Los perros suelen hacer sus necesidades, al despertarse, después de comer y después de jugar un rato largo, si durante esos momentos tú estás pendiente de él y te adelantas a “sus fallos” puede que la enseñanza sea muy eficaz y en poco tiempo, tu mascota se acostumbre a hacer sus cosas siempre fuera de casa y aguantarse si un día tardas un poco en sacarle.
Algunas cosas que NUNCA debes hacer, aunque mucha considera que son muy útiles pero que pueden ser nefastos para los perros, son por ejemplo, refregarle la cara contra el pipí que ha hecho en algún lugar indebido, pegarle (ni un poquito), encerrarlo, gritarle o no darle de comer en todo el día; así le crearás un alto nivel de miedo y, aunque no entienda por qué lo has hecho te tomará miedo, y tú no conseguiras lo que querías, que él entienda que no debe hacer sus necesidades ahí.
Muy bien, como verás aquí te he mostrado algunos ejemplos de las cosas que puedes hacer para corregir una faceta del comportamiento de tu perrito, lo que hace a sus necesidades. Ten en cuenta que es bueno que siempre antes de hacer cualquier cosa consultes la mayor cantidad de fuentes posibles para “pedir” segundas opiniones y así hacer las cosas de la mejor manera posible para tí y tu mascota; ambos serán felices.